¿Cómo entender la factura de luz y de gas? Todos los detalles

Nuestros asesores te ayudarán a realizar todas las gestiones

La factura de la luz y del gas llega a los hogares de los consumidores españoles cada mes, o de forma bimensual. Estos documentos no estan siempre claros a los ojos de todos los consumidores pero es de vital importancia conocer y entender tu factura de luz y gas para ser conscientes de lo que se paga por un determinado servicio y poder reclamar en caso de que haya errores en la factura.

Factura luz y gas: ¿qué es?

Las facturas de luz y gas, también llamadas facturas de los servicios energéticos muestran con exactitud el consumo que un cliente ha podido disfrutar durante un plazo determinado y el pago que el cliente debe realizar a cambio del servicio prestado por la comercializadora. La factura puede, potencialmente, sufrir pequeñas variables según la compañía con la que se contraten los servicios de luz y gas pero el contenido tiene que ser el mismo y el consumidor tiene que saber interpretar dicho contenido.

Estas facturas son necesarias para el seguimiento, por parte del cliente, de su consumo de luz y gas y para tener un justificante de pago, es decir, el consumidor paga por lo que ha utilizado, ni más ni menos, y gracias a la factura comprende cuales han sido sus gastos y puede también, a través de estos datos, buscar una forma de ahorrar en la factura de luz y gas y que sea más barata en el futuro.

A continuación van a explicarse por separado las facturas de luz y las facturas de las de gas de forma que se pueda ir a lo más concreto de cada tipo de factura y así entender el funcionamiento de ambas.

Factura de luz

Lo primero que se debe remarcar en la información de la factura eléctrica es si el consumidor se encuentra en el mercado regulado o en el mercado libre. Esto es muy importante ya que el precio de la factura (también electrónica) y las posibilidades de elegir entre varias tarifas de luz o de gas varían de forma según el mercado en el que se encuentre el cliente. Para poder calcular la factura luz de antemano se debe conocer este dato sin que quepa lugar a dudas.

Se puede saber si un consumidor se encuentra en el mercado libre o en el mercado regulado observando los datos que se encuentran debajo del logo de la comercializadora (esto funciona igual para las facturas de luz y las facturas de gas ya sean de Endesa, de Gas Natural Fenosa, Iberdrola…) escogida. Las siete comercializadoras que proporcionan servicios en ambos mercados tienen diferentes códigos para cada uno.

Si el consumidor ha contratado su servicio eléctrico a través del mercado libre, su tarifa es fija según la opción que haya contratado en la comercializadora, pero si se encuentra en el mercado regulado, el precio varia cada hora y el consumidor debe conocer las variaciones para poder ahorrar en su factura de la luz.

Una vez que se conoce el tipo de mercado se debe poner atención en los cargos que puede haber en la factura:

  • Término de consumo (o término de energía): La parte variable de la factura de luz que depende del consumo concreto de cada cliente a lo largo de un periodo concreto (habitualmente 1 o 2 meses) es aquí donde cobra importantancia si la tarifa funciona a través del mercado libre o el regulado.
  • Término de potencia: Esta parte de la factura es fija, se concreta cuando se contratan los servicios de una comercializadora y depende de la instalación eléctrica del domicilio y del número de electródomésticos que necesiten energia
  • Tarifas de acceso, (también conocidas como peajes): este gasto tiene una parte fija que regula el gobierno y otra variable que depende de la potencia contratada. Los peajes pagan, entre otras cosas, los gastos de distribución y transporte de la electricidad.
  • Impuestos: El IEE (Impuesto Especial sobre la Electricidad) y el IVA (Impuesto de Valor Añadido), respectivamente un 5,11269632% que se aplica a la suma del término de consumo y de potencia y un 21% que se aplica al total de la factura de luz

Estos cargos se encuentran siempre en la factura de luz pero se pueden dar casos en los que el consumidor vea otros gastos o cifras concretas que pueden ser puntuales y muy concretas o cambiar cada mes:

  • Descuentos: En la factura de la luz quedan reflejados los descuentos. Estos pueden aplicarse debido a una tarifa concreta de la comercializadora o pueden ser debidos a que el consumidor sea beneficiario de un Bono Social u otro descuento que proporcione el Estado por circunstancias personales concretas.
  • Sanciones: En la otra cara de la moneda se encuentran los gastos extra. Si el consumidor excede la potencia contratada o tiene un consumo especialmente elevado puede ser objeto de sanciones por parte de la compañía de luz.
  • Mantenimiento: En caso de que se haya necesitado algún tipo de reparación de la instalación o mantenimiento del sistema eléctrico la factura de la luz desglosará también este gasto añadido para la información y el posterior pago del consumidor.
  • Contadores: Por último, en el caso concreto de que el consumidor alquile el contador eléctrico, el precio periódico del alquiler también se encontrara en la factura.

Con todos estos datos el consumidor debería ser capaz de hacerse una idea de que es lo que está pagando en su factura de la luz.

Llama a papernest y te ayudamos a comprender tus facturas de luz y gas

919 014 150

Información

Factura de gas

De la misma forma que con la factura del es importante conocer si el consumidor se encuentra en el mercado libre o en el regulado. Puesto que esto indica si el precio es fijo o va cambiando. Se puede observar cual de los dos mercados es de la misma forma que la factura de luz, gracias a la información que se encuentra debajo del logo de la comercializadora.

Los cargos fijos que encontramos en la factura del gas son los siguientes:

  • Energía: Esto es el consumo de gas que se ha producido por parte del cliente en un periodo determinado.
  • Impuestos: En el caso del gas natural hay dos impuestos a tener en cuenta. El IVA que supone, como en el caso de la electricidad un 21% que se aplica al total. Y por otra parte el Impuesto de Hidrocarburo que varia según si el consumidor es un domicilio particular (0,00234€/kWh) o un local profesional (0,00054€/kWh).

De la misma manera, como veíamos con la factura de la luz, la factura del gas también tiene gastos variables que son en este caso:

  • Descuentos: En caso de que se aplique algún descuento al consumidor ya sea puntual o ya se aplique en cada factura del gas.
  • Alquiler: Esto es, el alquiler de los equipos de medición de gas.

Recuerda

Las facturas de luz y gas tienen una parte fija y una variable.

¿Cuándo llegan a casa las facturas de luz y gas natural?

Esta pregunta esta en la mente de todos los consumidores españoles. Al fin y al cabo es importante saber cuando van a llegar las facturas de luz y las facturas de gas para saber cuando hay que pagarlas. No es lo mismo tener que pagar una factura cada mes que hacerlo dos veces al año. En el caso de la luz y el gas solo hay dos opciones: el pago mensual o el bimestral.

Pago mensual

La primera opción es pagar de forma mensual. Si se escoge este modo de pago la lectura tanto de luz como de gas se hace de forma estimada, es decir, no se paga exactamente lo que se ha consumido sino una aproximación ya sea a lo alto o a lo bajo de lo que el cliente vaya a consumir. La ventaja de esta opción es que pagar menos un mes es, potencialmente, más cómodo para el consumidor que pagar más cada dos meses. El mayor inconveniente es que la factura, al ser aproximada, resulta más difícil de leer y comprender.

Pago bimestral

La segunda opción conlleva pagar cada dos meses sobre los datos de una lectura real, es decir, se paga exactamente lo que se consume de luz y gas o el cliente puede escoger también pagar cada dos meses una cuota fija. Las ventajas de esta segunda opción es que la tarifa siempre sea fija y no haya sorpresas ni en la factura de luz ni en la de gas. El inconveniente se encuentra en que al final de año se realiza el calculo real y si se ha pagado menos con la cuota fija se debe pagar la diferencia.

¿Factura de luz y gas digital o en papel?

Después de comprender la factura y saber cuando estará en las manos de los consumidores conviene saber que la factura de luz y gas no tiene porque llegar al buzón de la casa. Es posible sustituir la factura en papel por la factura digital y este tipo de cambio conlleva una serie de ventajas que pueden interesar a determinados consumidores.

En este momento ya no queda casi ningún proceso completamente analógico, todo se desarrolla, ahora, en el mundo digital. Es posible pasar las facturas de la luz y el gas también a este ‘nuevo mundo’ de Internet. Las facturas en papel tienen una serie de inconvenientes, se gasta mucho papel, con lo que no son muy buenas para el medio ambiente, son complicadas de comprender, se pueden perder o acabar resultando una montaña de papeles que no se sabe donde guardar.

Por todo esto la alternativa digital, que se encuentra en el espacio del cliente de las distintas comercializadoras, puede resultar muy atractiva. La factura digital se explica de forma interactiva, se puede hacer un seguimiento a tiempo real del consumo y no ocupa espacio en carpetas o en el ordenador, todo puede hacerse desde el espacio del cliente.

Aunque aun hay muchos consumidores que prefieren la tradicional factura en papel, cada vez un mayor número de clientes deciden pasarse a la opción digital. Las comercializadoras de luz y gas, están también intentando hacer más atractiva esta opción de forma que, dentro de unos años, las facturas de luz y gas en papel sean cosas del pasado.

¿Sabías que...

puedes ver tus facturas de luz y gas en el espacio del cliente la página web de la comercializadora?

¿Cómo y cuándo pagar las facturas de luz y gas?

Una vez comprendida la factura de la luz y del gas y habiendo recibido, ya sea en papel ya sea a través de Internet, la noticia de cuanto y cuando se debe pagar. Solo queda por saber cuando y como se debe pagar la factura. Las opciones dependerán de forma general de la comercializadora concreta pero aquí van a indicarse todas las opciones posibles para que sea cual sea la compañía de luz y/o gas en la que el cliente se encuentre sea capaz de encontrar la manera de pagar.

¿Cuándo pagar las facturas de la luz y el gas?

La respuesta a esta pregunta esta bastante clara. Se deben pagar las facturas lo antes posible una vez se hayan recibido. Pero ¿qué pasa si hay un retraso?. Aunque no hay una respuesta universal lo que pasa, de forma general, en estos casos es lo siguiente: si un consumidor no paga a tiempo su factura recibirá un mensaje de su comercializadora indicándole el retraso y pidiéndole que haga el pago, en caso de que el cliente siga sin pagar se enviara un último mensaje antes de cortar el suministro al consumidor.

Este proceso dura aproximadamente dos meses, es decir, se puede estar dos meses sin pagar la luz o el gas antes de un corte de suministro pero este impago viene con consecuencias serias y posibles multas o sanciones en futuras facturas.

¿Cómo pagar las facturas de luz y gas?

Hay muchas formas de pagar las facturas de luz y gas, según cada comercializadora esta ofrecerá más o menos. En este artículo se indicarán las cuatro formas más comunes de pagar dichas facturas:

  1. Domiciliación bancaria: Quizás la forma más habitual en que los consumidores pagan sus facturas de luz y gas. Para poder domiciliar la factura se necesita darle a la comercializadora una serie de datos: el documento de identidad del titular de la cuenta en la que se domiciliará la factura, los datos personales del mismo y el número de cuenta bancaria (IBAN).
  2. Pago con tarjeta: Si el consumidor prefiere pagar de forma puntual y no que la comercializadora coja el dinero directamente del banco cada mes se puede pagar con tarjeta bancaria, para ello se necesitarán: un ordenador, un teléfono o una tablet con conexión a internet, una tarjeta de crédito o de débito y la factura (cada factura tiene un código concreto que se necesita para hacer el pago).
  3. En una entidad bancaria: Cada comercializadora tiene acuerdos con bancos a través de los cuales, los clientes pueden pagar. En estas entidades bancarias seleccionadas (que varían según la comercializadora en cuestión) Se puede pagar en ventanilla, en efectivo o con tarjeta o a través del cajero automático, siempre y cuando se disponga de la factura.
  4. Transferencia bancaria: La última opción y, quizás, la menos habitual es la transferencia bancaria. Dicha transferencia la realizaría el consumidor a través de su cuenta a la cuenta bancaria de la comercializadora indicando en el concepto el número de contrato que aparece en la factura.

FAQ

¿Qué es la factura de la luz y el gas?

Es un documento que indica el consumo del consumidor de los servicios de luz y gas, además de los impuestos que estos servicios conllevan y, si aplica, determinados descuentos o sanciones.

¿Cuándo se pagan las facturas de luz y gas?

Las facturas llegan al consumidor una vez al mes o una vez cada dos meses, dependiendo de sus preferencias y de las opciones que ofrezca la comercializadora. El pago se debe realizar en el momento en que se reciba la factura.

¿Cómo se pagan las facturas?

Las facturas se pagan de diversas formas dependiendo de la comercializadora y de la comodidad para el consumidor: domiciliación bancaria, tarjeta de crédito, transferencia bancaria, en efectivo, en cajero automático…

Información

Actualizado el 24 Abr, 2024

redaction Redacción de Luz y Gas
Redactor

Alejandro Plaza

Redactor Energía

Comentarios

bright star bright star bright star bright star grey star

Más información sobre nuestra política de control, tratamiento y publicación de notificaciones